Movida en Las Rozas: Banderitas e insultos, (otra vez)

Movida en Las Rozas: Banderitas e insultos, (otra vez)

No pensaba volver a escribir más del tema por el momento, pero creo que la ocasión, una vez más, lo requiere. Y es que me cuesta a veces creer en lo que estoy viendo, y en cómo las personas pueden pasar de ser gente aparentemente normal, a convertirse en unos perfectos imbéciles, y lo digo sin miedo, porque lo que estoy haciendo es utilizar el adjetivo calificativo más suave que se me ocurre después de el desfile de incongruencias, absurdeces y gritos que más bien parecen sacados de la España que retrataba Berlanga, la del franquismo más rancio. Y estamos hablando de fútbol, algo aparentemente absurdo, ha tomado atmosfera de cutre e incluso, por qué no decirlo, casposo. Y es que Gerard Piqué, uno de mis adversarios más detestados para mí en lo deportivo, se ha convertido en objeto de defensa por la parte que me toca, ya que, sinceramente, no entiendo lo que está pasando, o si es que no estamos volviendo completamente gilipollas.

Las Rozas, Madrid. Comienza el entrenamiendo de la Selección española de fútbol, una institución de la que me desvinculé hace ya tiempo, pero eso son cosas mías, no tiene que ver con España, ni nada de eso. No obstante, al ver las imágenes que han ido apareciendo a lo largo del día, he observado muchas cosas, con sus respectivos matices y sin duda con sus protagonistas tan activos como irrespetuosos. Pero vamos por partes, porque aquí hay mucha más tela para cortar de lo que puede parecer.

Piqué es un futbolista que siempre ha estado señalado por el punto de mira de la prensa, y de cualquier aficionado que fuera seguidor de la Selección, ya que siempre ha mostrado a favor del referéndum en Cataluña, algo que por mi parte no entiendo que la gente se le pueda echar encima. Otra cosa que jamás ha dicho es que él sea independentista, que por las evidencias todo podría apuntar a que sí, pero es algo que nunca ha mencionado, ni se ha posicionado a favor o en contra de una posible independencia, (si lo fuera ya estaríamos hablando de otra cosa), por lo que no es entendible que la gente le catalogue de poco español, poco patriota o cualquier gilipollez de esas por amor al país, que además no está precisamente para quererlo mucho últimamente. Por otra parte tampoco entiendo a los que sí se consideran independentistas jugaran en la selección, como puede ser Pep Guardiola, no por que sea "¡ANTIESPAÑOL!", sino porque a mí me costaría ponerme una camiseta de Ciudadanos por ejemplo, que no me representa. Luego hubo ejemplos como Oleguer, que se largó de la concentración porque alegó que no se sentía español, entendible y respetado. Pero no quiero entrar ahí, después de todo sencillamente lo que intento es que se use el criterio, que me mientan si quieren, pero que lo hagan con criterio.

Quitando la pancarta de: "Piqué eres vomitivo".

Aunque lo que quiero traer hoy, es un sencillo ejercicio de ridículo que he observado, como decía en las imágenes de Las Rozas esta mañana. Un grupo de personas, armados con banderas de España, pulseritas a juego, y unas pintas de no haber leído un libro en su vida, han increpado al jugador Gerard Piqué porque ha acudido a la Selección, un día después de votar en el referéndum de Catauña, (cosa que insisto, no saben qué ha votado). Todo ha empezado a enrarecerse cuando, una multitud, parecida a las hienas, esperaba con ansia la entrada de su objetivo. Cuando éste ha pisado el césped, ha comenzado el apoteosis.

Siento que las imágenes vengan de un programa como el Chiringuito, pero es lo mejor que he encontrado para poder mostraros algo y que podáis haceros una idea. A medida que pasan los segundos la situación se vuelve cada vez más tensa, y la gente comienza a sacar toda la artillería. ¿Os acordáis de aquellos que decían que dejaran al fútbol en paz, y la política no podría ir jamás vinculada al mismo? Pues bueno, como ya dije ayer: ahora parece que sí que vale. Eso sí, sólo si es para sacar la banderita de España, si no, no. De pronto, aparece un señor que dice que tiene sesenta y tantos años, con una pancarta redactada a mano por él mismo (un auténtico asesianto a la literatura, por cierto), sin puntuación, ni tildes ni nada, ahí, ahí, ¡a lo español! Me inquieta basante esto último que menciono, tantos con los que discuto en Twitter (cuando tengo tiempo), tanta gente defendiendo la unidad de España, al gobierno fascista que tenemos, a eso que ellos llaman "El orgullo nacional" y todas esas mierdas, tanto amor a España, y una de las cosas más bonitas que tenemos, que en mi opinión, es el idioma, tan rico en vocabulario, eso parece que no lo aman demasiado, porque parecen tener cierta alergia a los libros, e incluso a aprender a escribirlo. Cosa entendible, hace unas décadas los estaban quemando sus antepasados ideológicos. Pero, ¿eso es todo? No, ni mucho menos.

Y yo, que soy más chulo, se lo pongo en catalán, tal como lo ponía en Google Translator.

Imagino que todas esta gente, que suele llamar a las personas de izquierdas vagos, no tendrían mucho que hacer en sus respectivos trabajos (si es que los tienen), para estar un lunes por la mañana allí para increpar a un tio que estaba, éste sí, trabajando. Pero como se estaban creiciendo y el ambiente invitaba a ello, han empezado a decir que se fuera de la Selección, que no le querían. Los cánticos se han empezado a oír: "no nos engañan, Cataluña es España", "Piqué, cabrón, España es tu nación". Pero vamos a ver, si vosotros mismo se lo estáis diciendo, que es español. Entonces, ¿por qué no va a jugar con la Selección española? Repito, me trae sin cuidado la Selección, pero por favor, ya sabemos que sois muy limitados, pero intentad ser un poco coherentes con lo que decís. 

Pero si ha habido un momento de máxima caspa en aquellas gradas, es cuando ya el caos estaba desatado, la euforia ha emergido y se han venido tan arriba, que no han podido evitar gritar: "¡viva la Guardia Civil!", "¡Viva España!".Ya sabéis, esos mismos que luego en la tasca se cagan en todo cuando les ponne una multa de tráfico, o les paran para hacerles una prueba de alcoholemia cuando están de camino al puticlub. Pero como digo, todo son puntos de vista, lo que pasa, es que a veces es inevitable sentir mucha grima al ver a este tipo de gente totalmente desencadenada. Como os llevo diciendo un rato: por favor, mentidme si queréis, pero con criterio, que el patetismo tiene un límite que las personas normales pueden aguantar. Y que conste que no pretendo defender a Piqué, aunque por una vez esté de acuerdo con su forma de actuar, sino quiero reivindicar que en las manifestaciones reales a las que hay que acudir por el bien de todos, esta gente está en su casa, pensando en que todo va bien, pero para estas chorradas, sí se desplazan a hacer el cavernícola. En cuanto tienen miedo de que el nudo ese del que hablaba Franco, con el que tenía todo atado, y bien atado, en algún momento llegue la democracia y lo pueda romper.